El impresionismo
Tendencia
pictórica desarrollada en el ultimo cuarto del siglo XIX, teniendo como
foco principal a Francia, aunque no dejo de ejercer en el reto de
Europa y del mundo. La paternidad del nombre de Impresionismo surge a
raíz de la primera exposición de un grupo de pintores, que en 1874 se
presentaron como sociedad anónima cooperativa de artistas, en ese
entonces un critico, Leroy, quien tomando el titulo de una obra de
Monet, “Impresión sol naciente”, y con la intención de ridiculizar a
todo el colectivo, publico un articulo bajo el titulo de “exposición de
los impresionistas”. A pesar de la ambigüedad del calificativo y de su
carácter injurioso, la mayor parte de los aludidos la aceptaron, con
algunas excepciones.
Sus pintores se aproximaron a la
naturaleza, llegando a pintar al “aire libre” y a prescindir de los
tonos heredados del academicismo (negros, marrones oscuros). Buscaron
también una pintura verdadera, que reflejara el instante, entendiendo
por tal, la conjunción del tema, la luz, los valores atmosféricos del
instante, valoran no el relieve si no el destello, lo cual les condujo
con frecuencia a cierta disolución de la forma en el color, en la luz y a
casi siempre dar una intensa vibración a los tonos.
La técnica
impresionista trata de plasmar la impresión coloreada, la sensación que
recibe el ojo al contacto con la luz. Toman una actitud critica frente
al carácter absoluto del color local de los objetos, pues este se va
condicionando tanto por la luz que en estos incide como por la acción de
la atmósfera y la colaboración del entorno.
Los impresionistas
tratan formas y colores a partir de la visión directa, intentando
desprenderse de convenciones aprendidas. Para ello utilizan una técnica
de pinceladas cortas y perceptibles, de pequeños puntos y comas. La luz,
que baña todos los objetos, disuelve los contornos.
Como lo que
a estos maestros les interesa es el haz vibrante de las cosas, sus
cuadros carecen de un asunto principal, no existe un tema o una
filosofía en común entre ellos. Esta es una gran diferencia con la
pintura anterior, no hay selección de tema, todos los campos, todos los
rincones urbanos o naturales pueden ser tema de tratamiento artístico,
porque todos están modelados por la luz, que es el protagonista único de
sus obras.
Con el impresionismo entra en la pintura de manera
irrefrenable, el subjetivismo del artista, cada uno de ellos maneja una
tonalidad personal, una modelación cromática tan distintas como lo son
las inspiraciones, se comienza a considerar una nueva dimensión: la
temporal, el pintor recoge el instante de la visión.
El conjunto
de los impresionistas realizó siete exposiciones hasta 1886. En 1883 se
inicia la decadencia del movimiento cuando surge con claridad la nueva
orientación de Cezanne, como Van Gogh o Gauguin y comienzan a
conformarse movimientos posimpresionistas.
Aparte de su
propagación directa el impresionismo ha tenido una repercusión mundial
en el sentido que la mayoría de los pintores desde esa época usan en
mayor o menor medida procedimientos que deben mucho al impresionismo.
Podemos decir que el impresionismo marca el primer paso hacia el arte
contemporáneo y el último paso de la tradición pictórica clásica.
Claude Monet (1840 - 1926): La expresión de la luz:
Nace en Paris en 1840, considerado como uno de los máximos
representantes del impresionismo. Fue Eugene Boudin quien le aconsejo
que pintara al aire libre de manera que pudiera captar las cosas tal
como se presentan en la realidad, con su verdadera forma de ser en la
luz y en el aire.
Sus temas de inspiración son los cielos perlinos de Paris, la niebla que
envuelve los contornos y los soles sin fuerte contraste pero disueltos
en el titilar de las superficies de todas las cosas. También lo es el
agua y los puertos, puentes y barcos que la rodean. Aun siendo estos sus
temas de inspiración, no son estos los temas de sus cuadros, pues el
principal tema en sus cuadros es siempre la luz, todas estas cosas están
condicionadas por los juegos de luces.
Obras y Autores:
-Edouard Manet:
|
Impresión el sol naciente |
-Claude Monet:
|
El Sena en Asnières |
-Auguste Renoir:
|
Bebedores de Absenta |
Postimpresionismo
La luz y los colores fueron los protagonistas de la pintura europea a finales del siglo XIX y comienzos del siglo XX.
Hacia
1880, ya se hablaba en parís de los pintores de las impresiones,
aquellos se trasladaron sus talleres a las calles, al aires libre y a la
naturaleza para captar los efectos de la luz sobre el paisaje. Se trata
de los pintores de la época de la fotografía y las leyes del color.
Asombrados
por la luminosidad y el movimiento, realizaron sus obras en medio del
paisaje natural o en aquellos rincones interiores donde la luz cubría
toda la visión. Manet, Monet, Renoir, Degas, Cézanee, Pissarro y Sisley
fueron algunos de sus máximos representantes europeos.
Con un
trazo menos realista que el de los impresionistas, los post-
impresionistas surgen hacia mediados de la década de 1880 en Europa. El
color y luz también fueron fuentes de su inspiración, pero con una
mirada más crítica a la sociedad burguesa, más imaginativa y más lúdica
respecto al tratamiento de las formas. De aquí que también sean
conocidos como expresionistas.
Esta corriente, los pintores más importantes fueron Redon, Van Gogh, Toulouse-Lautrec, Denis, Rousseau y Gauguin.
Uno
de los pintores más cautivantes del post-impresionismo fue Vicente Van
Gogh. De origen holandés, Van Gogh vivió en la pobreza y solo logró
vender un cuadro en toda su vida. S u mundo fue trágico. Su locura,
intermitente, según algunos autores, se hizo más evidente con el
suicidio de su hermano. A pesar de las adversidades que debió enfrentar,
en sus obras es posible interpretar la aguda mirada de un hombre
sensible y lleno de ternura de finales del siglo XIX. Entre los temas
que pintó destacan la alineación en la que había caído el hombre de la
era industrial, la deformación y la fatiga de sus cuerpos producto de la
explotación laboral, los sueños del ser humano, la luminosidad del
paisaje y el imperio del sol.
Su visión crítica de la sociedad
burguesa, así como su talento para crear un arte luminoso y creativo,
han hecho de las obras de Van Gogh, uno de los objetos de nuestros días.
Su
punto de partida fue la naturaleza, especialmente el paisajismo del
mediodía de Francia, en Arlés que era su patria espiritual. La
naturaleza le conmovía profundamente, y esta emoción prestaba fuerza a
su fantasía para elaborar la impresión obtenida.
Se empieza por
la infructuosa tentativa de querer seguir a la naturaleza, pero se
termina limitándose a crear con la paleta, y la naturaleza viene
después, decía.
Van Gogh pinta con pinceladas irregulares, líneas
románticas entrecortadas, que manifiestan la impaciencia que le
producía su exaltación interna. Los colores puros iban depositando su
huella sobre el lienzo, trabajados con la mano, con la espátula, con el
mango del pincel, o en muchos casos, exprimidos directamente de los
tubos.
En su deseo de mantener la visión provocada por la primera impresión, partió de la impresión cromática.
Pinto
con colores puros, con el rojo, azul y amarillo, especialmente con
amarillo real; colores que él sabia dotar de mayor profundidad, de mayor
fuego que en la realidad, colores que es su fantasía ardían de un modo
excesivamente pasional.
Obras y Autores: